La construcción de carreteras requiere una mayor resistencia al corte y al deslizamiento, por lo que los sistemas de anclaje son fundamentales para garantizar la estabilidad y la seguridad. Las necesidades de anclaje suelen concentrarse en dos áreas principales: estabilización de la subrasante y de los taludes. En el anclaje de subrasante, la base de la carretera se une con las capas de suelo o roca mediante distintos métodos de anclaje que mejoran notablemente su capacidad portante y estabilidad. Para la estabilización de taludes, los sistemas de anclaje pre esforzados previenen de manera eficaz deslizamientos y derrumbes, conservan la integridad de los taludes y aseguran la seguridad de la vía.
El sistema de barra autoperforante (SDA) integra en una sola operación la perforación, el anclaje y la inyección de lechada. Esta tecnología avanzada ofrece una solución eficiente y segura para la estabilización de suelos y formaciones rocosas, siendo clave en proyectos de refuerzo de roca, donde se busca asegurar la estabilidad estructural y la seguridad del entorno.
El sistema de barra autoperforante está compuesto por varios elementos. En el extremo perforador se encuentra la broca de anclaje, que permite abrir el taladro al mismo tiempo que facilita la inyección del material. La barra hueca actúa como el soporte principal. El acople de anclaje permite extender la longitud de la barra según las necesidades del proyecto. La placa distribuye las cargas superficiales, y la tuerca asegura todo el conjunto, garantizando un funcionamiento óptimo.
Diseñadas para diversas aplicaciones geotécnicas y de construcción